viernes, 16 de abril de 2010

Expresiones

No sé cómo lo haga él, pero comienzo a adentrarme en su mundo, en su forma de expresión, de desahogo, de diálogo con su mismo interior y exterior al mismo tiempo, de tal forma que me vi en la necesidad de hacerlo; sí, comienzo a escribir con los sentimientos, de la misma manera en que lo hace él.

Pero el objetivo no es de relatarlo, sino de relatarme, de mostrar todo aquello de lo que estoy hecho y por lo cual vivo, ese es el punto principal de esto: expresar lo expresable porque he comprendido que ya no hay más, y si lo hubiese, entonces no lo querría, ¿para qué? Me encuentro perfectamente completo.

¿Es necesario ponerle nombre y apellido? No, no lo creo. Muy bien sabe que estas palabras son producidas y dirigidas a una única persona, persona que ha sabido comprenderme en momentos de locura, persona que sabe cómo controlarme cuando parece que mi mundo se encuentra en problemas, persona que ha manipulado el mar y la tierra en un mismo instante para que mi destino fluya con completa normalidad; y en verdad no sé si se le pueda llamar persona a un ser que es indiscutiblemente diferente a todo lo que he conocido en este mundo terrenal.

No sé quién o qué se haya encargado de ponerla frente a mi camino, pero sin duda le estaría eternamente agradecido, pues es parte importante ahora en esto que llamo vida; y no es para menos, cuando encuentras a la persona indicada, a aquella que te toma de la mano sin importarle lo que fuiste, eres y serás, esa persona que te percibe y sabe muy bien lo que te pasa, esa persona indispensable en tu destino, agradeces por todo aquello que vives, porque creo ese es el punto, vives, y dejas a un lado aquellos pesares que has tenido: todo, absolutamente todo se olvida con esa persona.

Comienzo a preguntarme si lo he dicho todo; me supongo que aún hay palabras que decir, expresiones que realizar, formas de comunicación que hay que implementar, pero no las conozco, es por eso que a veces quisiera… quisiera dejar de soñar y actuar en la realidad, ser lo que soy y empezar a formar mi propio castillo, porque como dije, no soy él, sino yo el que ahora escribe; de esta manera siento una necesidad inexplicable por explotar todos mis recursos que tengo al alcance, sé que no son muchos, y que no me servirían para realiza grandes cosas, pero si no los comienzo a utilizar en la actualidad, ¿entonces cuándo los comenzaré a implementar?

¿Sabes? Envidio a aquellos que se toman de las manos y se abrazan, pues comparten una enorme felicidad llamada amor; envidio a todo aquel que sonríe por la calle mostrando su alegría en compañía de su amado o amada; envidio las horas frente al ocaso mientras juntos ven su vida pasar; envidio el aroma de la noche, mientras la Luna alumbra los callejones y los enamorados disfrutan de ella, pues es reflejo de conformidad; envidio… que envidia me da el no tenerte junto a mí, y peor aún, sufro por eso pues sé que te mereces todo al ser tan grandiosa, y de momento no puedo dártelo.

Aún con estos pensamientos, sé que algún día se cumplirá, no sé cuándo ni cómo, pero estaremos frente a frente, y como te he dicho, seré otro pues no sé en realidad quién soy en esas situaciones. Pero qué más da, la cuestión es vivirlo, no hay planes para las grandes situaciones como esa, que todo fluya en una misma dirección, que pase lo que tenga que pasar, que el mundo se venga abajo si así lo quiere; yo, no me moveré ni un centímetro pues sabré que el amor de mi vida, estuvo frente a mí.

No me cansaré de decírtelo: gracias por todo bela, amor mío.

jueves, 8 de abril de 2010

Muerte. Venganza. Poder

¿No es sublime el estar consiente de una actividad en donde interviene uno sin estar presente?

Caos: de nuevo. Bien, vas por buenos pasos y términos Icaro, por fin comienzas a ceder para dejar paso a mi libertad, sin temer, tienes que tener noción de que será lo mejor para el comienzo del final. Sí, sabemos a lo que nos enfrentamos cada vez que abres los ojos cuando la aurora comienza a iluminar, pero descuida, estoy yo para cubrir tu sufrimiento: aún me resultas patético.

Es maravilloso este desplegar de alas, al igual que tú, no se le pueden llamar alas a lo que porto en mi espalda, pero son tan fuertes ahora, que no dudo algún día, cercano, tengan más que plumas; sí, las he visto, enormes y fuertes, más que las tuyas claro está, y con ellas saldremos de esta oscuridad... perdón, corrijo: ¡saldré de esta oscuridad!.

No te lamentes por lo que suceda, no has dado el primer paso, sin embargo... del otro lado del castillo se dejan ver destellos de olvido. No llores por las noches al pensar e imaginar en tu futuro: no tienes. Sueña, ve y palpa el mío; es cuestión de liberarme lo antes posible, y verás que conseguiremos esas metas que en antaño teníamos; tu te has segado por aquello tan repulsivo e insignificante a lo que llaman... -imposible que pueda decirlo- y te has olvidado de tus propósitos, ¿lo has olvidado? tu meta principal es destruir palabras, argumentos y... personas.

No tengas miedo de lo que pase, para ese entonces no existiras¿sabes por qué?, porque pediré tu cabeza; sí, dejarás tu castillo de una vez por todas, habitarás en donde yo he habitado durante todas estas lunas, y yo ocuparé tu lugar. Una vez más te repito y sugiero que no tengas miedo, estarás bien ahí junto con aquel que te "aconseja", que no es más que un simple viejo que cree saberlo todo: es estúpido.

Así que respiremos, tú plomo y yo libertad, comienzan días de justicia tras un olvido señalado, que sin querer salió a la luz, y tu no fuiste quien lo pronunció, sino las casualidades y causalidades que suelen existir en este tiempo.

¡Qué hermosa vista tienes desde este tu balcón! Hermosas lunas, hermosas estrellas, hermoso horizonte iluminado por un Sol que se oculta; hermosa... ahora te comprendo; descuida, no me intereso por debilidades, será lo primero que muera... sino es que ya lo está...

Eres tan insignificante junto a mi: tan pequeño, tan débil, tan diminuto, tan... tan carente de adrenalina. Deja de temblar, pronto terminará tu agonía y da gracias a la poca vida que tienes, de que yo esté aquí ¿qué serías sin una fortaleza como yo? Nada.

Falta tan poco; yo retomaré lo que alguna vez comensaste. Muerte. Venganza. Poder.
No llores, tu funeral aún no comienza... aunque... ya te han comenzado a sepultar, y no he sido yo.